Sus bordes y proceso de sellado permiten colocar líquidos desinfectantes y sanitizantes sin derramarse de la alfombra.
Los felpudos Captor® se lavan facilmente solo con agua y pueden volver a colocarse para su uso de forma inmediata.
El material de los felpudos y alfombras Captor® no se deforma y es antibacteria, evitando la generación de hongos y malos olores con el paso del tiempo.